En esto llegan a la granja llamada Getsemaní, y dice a sus discípulos: "Sentaos aquí, mientras que yo hago oración". Y llevándose consigo a Pedro, y a Santiago, y a Juan, comenzó a atemorizarse y angustiarse. Y díjoles: "Mi alma siente angustias de muerte: aguardad aquí, y estad en vela". Y apartándose un poco adelante, se postró en tierra; y suplicaba que, si ser pudiese, se alejase de El aquella hora. "Oh Padre míos, decía, todas las cosas te son posibles: aparta de mí este cáliz; mas no sea lo que yo quiero, sino lo que tú". Viene después a los tres, y hállalos dormidos, y dice a Pedro: "Simón, tú duermes? ĦAun no has podido velar una hora! Velad y orad para que no caigáis en la tentación. El espíritu a la verdad está pronto; pero la carne es flaca". Fuese otra vez a orar, repitiendo las mismas palabras. Y habiendo vuelto, los encontró de nuevo dormidos, porque sus ojos estaban cargados de sueńo; y no sabían qué responderle. Al fin vino tercera vez, y les dijo: "Ea, dormid y reposad. Pero basta ya: la hora es llegada: y ved aquí que el Hijo del Hombre va a ser entregado en manos de los pecadores. Levantaos de aquí, y vamos; que ya el traidor está cerca". (vv. 32-42)
Glosa
Después que predijo el Seńor el escándalo de sus discípulos, narra el Evangelista su oración, en la que se cree que rogó por ellos. Citando antes el lugar, dice: "En esto llegan a la granja llamada Getsemaní".
Beda, in Marcum 4, 43
Hasta hoy se enseńa el lugar de Getsemaní, en donde oró el Seńor a la falda del monte de los Olivos. La palabra Getsemaní quiere decir valle fértil, o de la fertilidad. Orando el Seńor en el monte, nos enseńa que debemos buscar en la oración las cosas sublimes, y orando en el valle de la fertilidad, que guardemos siempre en la oración la humildad y el fecundo amor del corazón. El mismo, en el valle de la humildad y por su fecunda caridad, sufrió la muerte por nosotros.
Pseudo - Jerónimo
En el valle de la fertilidad también recios toros le han sitiado ( Sal 21). "Y dice a sus discípulos: Sentaos aquí, mientras que yo hago oración": se separan de El en la oración los que se separan en la pasión, porque El ora, y ellos duermen, oprimidos bajo el peso de su corazón.
Teofilacto
Acostumbraba a orar solo, para hacernos ver que debemos buscar el silencio y la soledad para orar. "Y llevándose consigo a Pedro, y a Santiago, y a Juan". Lleva consigo sólo a los tres que fueron testigos de su gloria en el monte Tabor, para que lo sean también de su tristeza, y vean por ella que era verdadero hombre. "Y comenzó a atemorizarse y angustiarse", porque habiendo asumido toda la humanidad, tomó las propiedades naturales del hombre: el atemorizarse, el angustiarse y el entristecerse naturalmente, y puesto que es natural que los hombres vayan a la muerte contra su voluntad. "Y díjoles: Mi alma siente angustias de muerte".
Beda, in Marcum 4, 43
Dios constituido en cuerpo, se expone a la fragilidad de la carne, para privar de todo pretexto a los que abjuran el misterio de la encarnación. Quien recibió el cuerpo debió recibir todo lo que es del cuerpo, como el hambre, la sed, las angustias y la tristeza; pero la Divinidad no puede experimentar cambio alguno por estas alteraciones.
Teofilacto
Algunos han entendido este pasaje como si dijera: Estoy triste, no porque deba morir, sino porque los israelitas mis compatriotas han de crucificarme, y deben ser excluidos por ello del reino de Dios.
Pseudo - Jerónimo
Esto nos enseńa también a temer y entristecernos ante el juicio de la muerte, porque no podemos decir nosotros, como El decía: Viene el príncipe de este mundo, aunque no hay en mí cosa que le pertenezca ( Jn 14,30).
"Aguardad aquí, y estad en vela".
Beda, in Marcum 4, 43
No es el sueńo ordinario el que les prohibe, porque no era tiempo de ello aproximándose como se aproximaba el peligro, sino el de la infidelidad y la pereza del espíritu. Apartándose un poco, se postra hasta el suelo, manifestando la humildad de su espíritu en la actitud de su cuerpo. "Y apartándose un poco adelante, se postró en tierra; y suplicaba que, si ser pudiese, se alejase de El", etc.
San Agustín, De consensu Evangelistarum 3, 4
No dijo: si se puede hacer, sino si ser pudiese, porque Dios puede hacer lo que quiere. Así que si ser pudiese es lo mismo que si dijera si es tu voluntad. Y para que no se juzgue que limitaba el poder del Padre, manifestó el sentido de lo dicho ańadiendo: "Oh Padre mío, todas las cosas te son posibles", con lo cual expresa claramente que no había aludido al poder, sino a la voluntad del Padre. San Marcos refiere que no dijo solamente Padre, sino Abba Pater, significando Abba en hebreo lo que Pater en latín. Y quizá el Seńor dijo ambas palabras a causa de algún misterio, queriendo mostrar que admitía aquella tristeza como representante de su cuerpo la Iglesia, cuya piedra angular El es, juntando a los hebreos que son los que dicen abba y a los gentiles que dicen pater.
Beda, in Marcum 4, 43
Ruega que aparte de El aquel cáliz para mostrar que era hombre verdaderamente: "Aparta de mí este cáliz, dice". Pero recordando que ha sido enviado para beberle, cumple su misión, y exclama: "Mas no sea lo que yo quiero, sino lo que tú". Es como si dijera: Si la muerte puede morir, sin que muera yo según la carne, aparta de mí este cáliz; mas como esto no puede ser, no sea lo que yo quiero, sino lo que tú. Son muchos aún a los que entristece la idea de la muerte, y la evitarían en cuanto es posible, si tuviesen un corazón recto; mas si no pueden, digan lo mismo que por nosotros dijo el Seńor.
Pseudo - Jerónimo
Con lo cual no cesa de enseńarnos hasta el fin que debemos obedecer a los padres y anteponer su voluntad a la nuestra. "Viene después, y hallólos dormidos". Duerme su espírituasí como su cuerpo. Viniendo el Seńor después de su oración y viendo dormidos a sus discípulos, increpa sólo a Pedro. "Y dice a Pedro: Simón, ¿tú duermes? ĦAún no has podido velar una hora!", lo cual equivale a: Tú, que no has podido velar una hora, ¿cómo puedes despreciar la muerte ofreciendo morir conmigo? "Velad y orad, para que no caigáis en la tentación", esto es, negándome.
Beda, in Marcum 4, 43
No dice: Orad para no ser tentados, porque esto es imposible para la naturaleza humana, sino para que no caigáis en la tentación, es decir, para que la tentación no os venza.
Pseudo - Jerónimo
Se dice que entra en la tentación el que descuida la oración.
"El espíritu a la verdad está pronto; pero la carne es flaca".
Teofilacto
Que es como si dijera: Vuestro espíritu está pronto para no negarme y por eso lo prometéis, pero vuestra carne es débil de tal modo, que entraríais en la tentación si Dios no os diese fuerza por la oración.
Beda, in Marcum 4, 43
Aquí reprende a los temerarios que creen poder conseguir todo lo que piensan; y lo cierto es que, cuanto más confiamos en el ardor de nuestro espíritu, más debemos temer la fragilidad de nuestra carne.
"Fuese otra vez a orar, repitiendo las mismas palabras".
Teofilacto
Para probar con esta segunda oración que era verdaderamente hombre. "Y habiendo vuelto, los encontró de nuevo dormidos". Sin embargo, los reprochó con vehemencia. "Porque sus ojos estaban cargados de sueńo, y no sabían qué responderle". Teniendo, pues, en cuenta nuestra humana flaqueza, aprendamos a no prometer, estando cargados de sueńo, alguna cosa que para nosotros sea imposible. Por esto volvió a repetir por tercera vez la misma oración. "Al fin vino por tercera vez, y les dijo: Ea, dormid y reposad". No se altera contra ellos porque lo hayan hecho peor después de sus reproches, sino que les dice irónicamente: "Dormid y reposad", porque sabía que se acercaba ya el traidor. Y que habló con ironía lo confirma lo que sigue: "Basta ya: la hora es llegada; y ved aquí que el Hijo del Hombre va a ser entregado en manos de los pecadores". Al hablarles así, venía a decirles: Ahora que el enemigo se aproxima, es tiempo que durmáis. Después ańade: "Levantaos de aquí y vamos, que ya el traidor está cerca". Y no se lo advierte para que huyan, sino para que salgan al encuentro del enemigo.
San Agustín, De consensu Evangelistarum 3, 4
O en otro sentido: el haber dicho el Seńor: "Basta" después de "dormid y reposad" y de ańadir luego: "La hora es llegada, y ved aquí que el Hijo del Hombre va a ser entregado", hace ver que el Seńor guardó un momento de silencio, después de las palabras "dormid, reposad", para dar lugar a que descansasen, y ańadió luego "la hora es llegada", intercalando "Basta", es decir, de descanso.
Pseudo - Jerónimo
Los tres sueńos de los discípulos significan los tres muertos que resucitó el Seńor: el primero en la casa, el segundo cuando iba al sepulcro, y el tercero en el sepulcro; y las tres oraciones del Seńor nos enseńan a orar por lo pasado, lo presente y lo futuro.